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Conserva el verano con un lecho de verduras en conserva

Receta de lecsó de verduras en conserva

El verano es una época en la que nuestros jardines y mercados literalmente rebosan de verduras frescas. Pimientos coloridos, tomates jugosos, calabacines crujientes y muchos otros frutos nos sonríen desde cada parcela y puesto. Pero, ¿qué hacer cuando quieres conservar estos sabores de verano para más adelante, en los días más fríos de otoño e invierno? Uno de los métodos comprobados es la conservación, y el lecsó de verduras en conserva es una excelente manera de guardar las alegrías del verano en un frasco. Esta receta de lecsó de verduras en conserva es sencilla, rápida y, al mismo tiempo, increíblemente deliciosa.

Lechoso de verduras en conserva: ¿Por qué te encantará?

El lecsó es un plato tradicional que tiene sus raíces en la cocina húngara, pero su popularidad se ha extendido a muchos otros países, incluida la República Checa. Este sencillo plato combina pimientos frescos, tomates y cebolla, bases que se pueden modificar fácilmente según tu gusto. El lecsó de verduras en conserva es una variante ideal para conservar esta combinación de sabores para más adelante.

La ventaja de la conservación es que puedes preparar el lecsó con anticipación y, en cualquier momento del año, calentarlo rápidamente y servirlo como plato principal o guarnición. Los frascos llenos de lecsó en la despensa pueden salvarte el almuerzo o la cena cuando no tienes tiempo para cocinar durante mucho tiempo. Además, el lecsó de verduras en conserva conserva vitaminas y minerales de las verduras frescas, por lo que no solo sabe genial, sino que también es saludable.

Cómo preparar lecsó de verduras en conserva paso a paso

Para esta receta de lecsó de verduras en conserva necesitarás algunos ingredientes básicos que probablemente ya tengas en tu cocina o jardín. Antes de comenzar, es importante preparar y planificar todo correctamente para que el proceso se desarrolle sin problemas.

Selección y preparación de ingredientes

La base de un lecsó exitoso son ingredientes de calidad y frescos. Necesitarás:

  • Pimientos – idealmente rojos, amarillos y verdes, que no solo darán sabor al lecsó, sino también un hermoso color.
  • Tomates – tomates maduros y jugosos son esenciales para crear una base rica.
  • Cebolla – la cebolla le dará al lecsó dulzura y profundidad de sabor.
  • Calabacín – si te gusta una textura más suave, agrega calabacín, que complementará perfectamente el lecsó.
  • Sal, pimienta y posiblemente otras especias al gusto, como pimentón dulce o ajo.

Comienza lavando y limpiando bien todas las verduras. Corta los pimientos en trozos medianos, puedes pelar los tomates y cortarlos en trozos más pequeños. Pica la cebolla finamente y corta el calabacín en cubos.

Cocción del lecsó

Ahora viene la parte de cocinar. En una olla grande, calienta aceite y sofríe la cebolla hasta que esté blanda y comience a dorarse. Este es el momento en el que la cebolla comenzará a liberar su dulzura y preparará la base para el resto del plato. Luego añade los pimientos cortados y saltéalos brevemente para desarrollar sus sabores.

A continuación, añade los tomates y el calabacín, sazona con sal, pimienta y, según tu gusto, puedes añadir otras especias, como pimentón molido, que le dará al lecsó un suave sabor ahumado. Deja que todo se cocine lentamente a fuego bajo hasta que las verduras estén tiernas y se forme una mezcla aromática. El proceso de cocción dura alrededor de 20-30 minutos, durante los cuales los sabores se combinan en una deliciosa base. Ten cuidado de que la mezcla no quede demasiado líquida, si es necesario, puedes cocinarla un poco más sin tapa para que el exceso de líquido se evapore.

Preparación de frascos y conservación

Cuando el lecsó esté listo, es importante conservarlo adecuadamente para que dure el mayor tiempo posible en los frascos. Prepara frascos limpios con tapas; es ideal esterilizar los frascos antes de usarlos. Puedes, por ejemplo, hervirlos brevemente en agua hirviendo o esterilizarlos en el horno. La esterilización es importante para evitar que se formen bacterias en los frascos que puedan echar a perder el lecsó.

Vierte el lecsó caliente en los frascos preparados, que debes cerrar herméticamente de inmediato. Luego coloca los frascos en una olla de conservación con agua y conserva durante unos 20 minutos. Este paso es crucial para que el lecsó en los frascos dure meses sin necesidad de refrigeración.

Almacenamiento y uso

Almacena el lecsó de verduras en conserva en un lugar seco y fresco, idealmente en la despensa. Los frascos correctamente conservados te durarán varios meses sin que su contenido se eche a perder. Cuando tengas antojo de algo rápido y delicioso, simplemente abre un frasco, calienta el lecsó y sírvelo con pan fresco o como guarnición con carne o pasta.

Esta receta de lecsó de verduras en conserva es ideal para quienes desean conservar los sabores del verano para las épocas más frías. Conservar las verduras de esta manera te permitirá disfrutar de la frescura y riqueza del verano en cualquier momento, incluso cuando fuera esté nevando o lloviendo. El lecsó de verduras en conserva no solo es práctico, sino también increíblemente delicioso. Además, cuando tengas una reserva de frascos llenos de lecsó, siempre tendrás a mano una comida rápida y nutritiva que toda la familia apreciará.

No tengas miedo de experimentar y agregar al lecsó otros ingredientes según tu gusto. Hay muchas posibilidades y cada uno puede encontrar su combinación ideal. Ya sea que elijas los clásicos pimientos y tomates, o agregues champiñones u otras verduras de temporada, una cosa es segura: el lecsó de verduras en conserva se convertirá en un tesoro en tu despensa al que querrás volver una y otra vez.

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